Pensando en infinitos copos de nieve (2ª parte). Bonitas historias de creación y Teorías del todo.
Hace ya cuatro años que publiqué esta nota llamada “ Pensando en infinitos copos de nieve ” y lamentable o afortunadamente (vayan ustedes a saber) sigo pensando en ellos. Más y mejor, estaría bien decir, pero no. Pienso más, pero no mejor. Para muestra el rumbo de este blog. En realidad sufro algo así como una inmersión profunda y lenta, muy lenta. Hace cuatro años pervivía (a duras penas ya) en mí un entusiasmo que me hacía dar algún que otro brinco, sacar la cabeza y mover la cola alegremente para, de nuevo, lanzarme al mar. Con el tiempo este entusiasmo ha desaparecido y el movimiento me lleva a lugares cada vez más profundos, menos interesantes y en absoluto relevantes (para el resto de la humanidad). El frío del mar va entumeciendo mis huesos y la fricción de las cosas me machaca la carne, pero no llego a hacer costra porque mi piel cicatriza muy mal… así que aún cayendo en picado, sigo mirando hacia arriba, esperando y medio flotando, como un muerto viviente o algo así. Por supue