Entradas

Mostrando entradas de agosto, 2016

Desentendiéndose del tiempo

Imagen
LA MONTAÑA MÁGICA, THOMAS MANN CAPÍTULO VII Un paseo a la orilla del mar ¿Puede narrarse el tiempo, el tiempo en sí mismo, por sí mismo y como tal? No, esto sería en verdad una empresa absurda. Una narración en la que se dijera: “El tiempo transcurría, se esfumaba, el tiempo fluía” y así sucesivamente… Ningún hombre en su sano juicio consideraría algo así como un relato. Sería, poco más o menos, como si se pretendiese mantener febrilmente una única nota, o un único acorde durante una hora y eso se hiciera pasar por música. La narración se parece a la música en que se desarrolla en el tiempo, ”llena el tiempo de elementos con sentido”, lo “subdivide” y con ello crea la sensación de que “pasa algo”, por citar, con la piedad melancólica que se concede a las palabras de los difuntos, las expresiones que solía utilizar el buen Joachim: palabras que se llevó el viento hace ya mucho… de hecho, no sabemos si el lector es claramente consciente del tiempo a que se remontan. El tiempo es el